Cura Romana

No, la Cura Romana es un tratamiento ideado para perder de manera efectiva los kilos demás y no recuperarlos. Consiste en la aplicación de una hormona reguladora de la ansiedad la cual evitará el consumo inadecuado de alimentos. Este procedimiento, acompañado de una dieta baja en calorías y un seguimiento médicos, lo que ocasiona la reducción de peso rápida y segura.

La hormona aumenta el metabolismo y promueve la quema de grasas. A medida que se metaboliza la grasa corporal almacenada, alrededor de 2,000 calorías se liberan en el torrente sanguíneo, lo que permite una baja en calorías sin experimentar fatiga, debilidad o hambre.

Con la Cura Romana se logra perder un promedio de 200 a 400 gramos de grasa por día.

No, la Cura Romana es el único tratamiento que te permite perder mucha grasa sin perder masa muscular. En una dietas corriente normalmente se pierde más músculo que grasa.

En cada cirugía de lipoescultura se retira grasa subcutánea (gorditos), pero nuestro cuerpo responde con más grasa visceral produciendo en los órganos, con lo que inicia un círculo vicioso. Mientras que con la Cura Romana no sucede eso.

El tratamiento hace un efecto de modelado del contorno del cuerpo debido a que elimina la grasa sin perder musculo. En otros tratamientos para bajar de peso, se suele perder grasa a expensas del músculo, provocando que las personas finalicen más delgadas pero con un cuerpo flácido.

La Cura Romana se centra primordialmente en la grasa localizada, como la que se encuentra en el abdomen, el cuello, la papada, la espalda, la parte superior del brazo, las caderas y los muslos, que son las zonas más difíciles de perder grasa.

Aparte de bajar de peso de una forma rápida y segura, la Cura Romana los niveles de energía se aumentarán y el sueño le resultara más reparador.  La calidad de la piel mejora, volviéndose más firme, juvenil y tendrá una mejor apariencia, además verá una reducción significa en la aparición de nueva celulitis. Sus niveles de azúcar y colesterol en la sangre se reducirán, y tendrá una mejor manejo de la aparecimiento de antojos.

El tratamiento hace un efecto de modelado del contorno del cuerpo debido a que elimina la grasa sin perder musculo. En otros tratamientos para bajar de peso, se suele perder grasa a expensas del músculo, provocando que las personas finalicen más delgadas pero con un cuerpo flácido.

La Cura Romana se centra primordialmente en la grasa localizada, como la que se encuentra en el abdomen, el cuello, la papada, la espalda, la parte superior del brazo, las caderas y los muslos, que son las zonas más difíciles de perder grasa.

La ventaja de este tratamiento es que no tiene efecto rebote, o si se produce es mucho menor, ya que el metabolismo se mantendrá alto, lo que hace que el peso perdido no se recupere una vez finalizado el tratamiento. Con otros tratamientos o dietas, tu metabolismo se mantiene bajo, lo que provoca que grandes cantidades de grasas se vuelvan a acumular.

El tratamiento hace un efecto de modelado del contorno del cuerpo debido a que elimina la grasa sin perder musculo. En otros tratamientos para bajar de peso, se suele perder grasa a expensas del músculo, provocando que las personas finalicen más delgadas pero con un cuerpo flácido.

La Cura Romana se centra primordialmente en la grasa localizada, como la que se encuentra en el abdomen, el cuello, la papada, la espalda, la parte superior del brazo, las caderas y los muslos, que son las zonas más difíciles de perder grasa.

Se requiere disciplina. Es muy importante y esencial que quien se someta a la Cura Romana sea una persona disciplinada. Se debe tener constancia y fuerza de voluntad. Si piensa que es una de esas personas que no pueden minimizar su ingesta de alimentos o le es difícil completar una dieta, este tratamiento no es para usted.

Sí, es muy importante, ya que permite evaluar de forma cercana y profesional todos los aspectos y requerimientos del paciente.